La migraña es ya la segunda causa de discapacidad en España y la primera en adultos menores de 50 años. Más del 50% de las personas que padecen esta enfermedad neurológica presentan un grado de discapacidad grave o muy grave, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Este lunes se celebra el Día Europeo de Acción contra la Migraña, una fecha dedicada a la concienciación de esta enfermedad neurológica que afecta a cinco millones de personas en España y es la tercera enfermedad más frecuente del mundo.
Alrededor de un 14% de la población europea padece migraña. El 80% los casos son mujeres de mediana edad (20–50 años), aunque también afecta a un 9% de los niños y jóvenes.
En España, según datos de la SEN, alrededor de 5 millones de personas padecen esta enfermedad, de los cuales 1,5 millones la sufren en su forma crónica.
Tipos de migrañas
Tal y como explica el Doctor Pablo Irimia, Coordinador del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología, existen tres tipos de migraña "dependiendo de la frecuencia en la que aparecen las crisis de dolor de cabeza y de la presencia o no de aura": migraña crónica, episódica y con aura.
"Cuando una persona con migraña sufre crisis de dolor de cabeza más de 15 días al mes, se denomina migraña crónica, frente a la denominada migraña episódica", afirma. "Si el dolor de cabeza va acompañado de la presencia de síntomas neurológicos que preceden habitualmente al dolor de cabeza (alteraciones en la visión u hormigueos) se denomina migraña con aura”, añade.
Tal y como asegura Irimia, la migraña crónica produce entre cuatro a seis veces más discapacidad que la migraña episódica. Además, las personas con migraña con aura tienen un riesgo mayor de sufrir otro tipo complicaciones, como ictus, que las personas que la padecen sin aura. En España, el 3% de la población padece migraña con aura y otro 3% migraña crónica.
Causa genética
Aunque las causas de la migraña aún no están del todo claras, todo parece apuntar a la existencia de una alteración neurológica en el procesamiento de los estímulos dolorosos por parte de los pacientes, con un claro componente hereditario. Se estima que la migraña tiene una heredabilidad del 42% y ya se han identificado más de 40 marcadores genéticos relacionados con la enfermedad.
Esta alteración y predisposición genética, unida a otros factores o circunstancias, precipitan o desencadenan las crisis de dolor de cabeza: más del 96% de los pacientes españoles atendidos en las consultas de Neurología es capaz de identificar algún factor precipitante de sus crisis.
La migraña es ya la primera causa de discapacidad en adultos menores de 50 años en España.
“Aunque se han descrito numerosas circunstancias o situaciones que pueden actuar como precipitantes de crisis de migraña, porque éstas no afectan de igual manera a todos los pacientes, los más habituales son los hormonales (75%), el estrés (71%) y los relacionados con las alteraciones en el patrón de sueño (68%). Pero también otros como el consumo de alcohol, tabaco, el ayuno, cambios atmosféricos o el ruido”, señala el doctor.
Precisamente a estos a factores ambientales y personales se achacan las diferencias de prevalencia que existen entre las distintas comunidades autónomas. Mientras que se estima que en España la migraña afecta al 12,6% de la población general, en Canarias, Murcia y Cantabria el porcentaje se eleva a un 18%. Por el contrario, en Navarra, Castilla-La Mancha y Aragón, la padecen menos del 10% de la población.
La falta de diagnóstico, principal escollo
Identificar los factores precipitantes de las crisis de dolor de cabeza y tratar de evitarlos es el primer paso para el tratamiento de esta enfermedad. No obstante, es necesario tener primero un diagnóstico correcto. La falta de concienciación de la sociedad provoca que más de un 40% de las personas que padecen migraña en España estén aún sin diagnosticar.
Además, se estima que un paciente puede tardar más de 6 años en recibir el diagnóstico y que pueden pasar hasta 14 años desde la primera crisis de migraña hasta la primera consulta con atención especializada.
“Esta falta de diagnóstico y, por lo tanto, de tratamiento adecuado, unido a la automedicación, es la principal causa de cronificación de la migraña. Cada año, un 3% de la población española que padece migraña episódica pasa a tener una migraña crónica, que no solo es más discapacitante, sino que también hace que su tratamiento sea más complicado”, destaca Irimia.
Estrés, ansiedad y depresión
Asimismo, las personas con migraña suelen presentar numerosas comorbilidades asociadas como trastornos vasculares, enfermedades neurológicas, trastornos psiquiátricos y psicológicos, trastornos del sueño, enfermedades inflamatorias...etc. que pueden empeorar las crisis en términos de duración, frecuencia o intensidad del dolor.
En este sentido, el estrés, la ansiedad y la depresión suelen ser las comorbilidades más frecuentes. Se estima que más del 50% de las personas con migraña padecen estrés, más del 30% insomnio y/o depresión, y más del 20% ansiedad.
La importancia de recibir un tratamiento temprano
Para reducir el impacto de la migraña, desde la SEN subrayan la importancia de fomentar el tratamiento temprano y adecuado y promover la prescripción de tratamientos preventivos.
En los últimos años se han producido grandes avances en el tratamiento preventivo de la migraña, con la aparición de varias alternativas terapéuticas. Sin embargo, se estima que menos del 14% de los pacientes que requieren tratamiento preventivo lo están recibiendo.
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